“La principal actividad es la preservación y el amigable uso de toda la riqueza ambiental de la gran área de reserva, son aproximadamente 1.200 hectáreas, que comprende un intocado espeso bosque en el que aún es posible avistar tigre, venado y otras especies animales”.
En el año 2012 Alberto Baquero N., Hugo Mantilla T. y quien les narra esta crónica en cumplimiento de trabajo investigativo para la EMSA, con la amable anuencia de Gladys Tamayo E., su propietaria, estuvimos en una Reserva Natural de la Sociedad Civil localizada en la zona rural del metense municipio de San Martín. Como anfitriona ella estuvo y fue nuestra fuente primaria.
Tan acogedor reservorio en la vereda La Novilla se denomina Rey Zamuro: Hacienda Matarredonda. Para ser ecuánime debo decir que a esta propiedad se le suma la de Las Pampas de Lalo Enciso y que las dos son colindantes con la famosa finca de Matupa.
Al entrar en contacto con sus actuales propietarios de inmediato llama la atención es saber que desde la segunda mitad del siglo XIX la gran hacienda ha pertenecido a la familia Enciso, lo que quiere decir que su tenencia es centenaria y ellos lo soportan con documentos de esa época que certifican dicha posesión con fines ganaderos.
En lo referente a su riqueza paisajística se la deparan sus topografías puesto que dichas fincas tienen sabanas y serranías, situación física que les da connotaciones ambientales de particular complejidad en su flora y fauna nativas, además de tener espejos de agua y ser nacimiento de muchos caños, cañadas y hasta ríos.
Salvo las labores de ganadería no extensiva, la principal actividad que allí manejan es la preservación y el amigable uso toda la riqueza ambiental de la gran área de reserva, son aproximadamente 1.200 hectáreas, que comprende un intocado espeso bosque en el que aún es posible avistar tigre, venado y otras especies animales ya difíciles de encontrar en esa región distante unos 40 kilómetros de la cabecera municipal.
Durante algunas décadas quien ejerce como encargado de Matarredonda es un personaje con reconocimiento folclórico más allá de su municipio. Él se llama Manuel Torres R., Chicuaco, hombre faculto a quien Gladys Tamayo Enciso, su gentil patrona, le ha depositado toda su confianza.
Tanto en Matarredonda como en Las Pampas, sus casas de habitación están acondicionadas para atender turismo cultural por la ganadería tradicional y científico como quiera que es un laboratorio vivo, de ahí que con alguna regularidad reciben tanto a grupos universitarios de Bogotá y a ciudadanos europeos. También tienen la opción de zonas de camping.
En la cuenta del Facebook de la Reservas Naturales Rey Zamuro y Matarredonda está la actual oferta de servicios para sus visitantes. Esta gama se compone de: Cocina Nativa (nuevo plato), Recorridos enfocados en avistamiento de aves y primates, Búsqueda nocturna de anfibios y reptiles, Recorrido etnobotánico por el bosque y la sabana, Sumergirse en el Morichal (fauna acuática), Usos sostenible de la sabana: Apicultura (cupos limitados), Taller de ordeño, Amanecer Llanero, Atardecer Llanero, Taller de pesca tradicional, Juego cultural de Vaquería y Saberes tradicionales y Escuchar el bosque, entre otras atracciones.
En el Meta muy pocas personas saben que en territorio rural del municipio de San Martín se localiza esta Reserva ecológica de la sociedad civil convertida en Importante centro de investigaciones, la cual es más conocida por instituciones de educación superior del interior del país. Un ejemplo reciente es la calificación académica como mejor tesis de pregrado de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de los Andes, realizada por la estudiante Sophía Bohórquez del equipo Bothroperio, quien llevó a cabo su investigación sobre la serpiente Cuatronarices en el sanmartinero laboratorio vivo de la Reserva Natural Rey Zamuro: Hacienda Matarredonda.
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Buenas tardes Oscar,
Excelente descripción de tan maravillosa reserva natural, que permite destacar a los propietarios, por su mente abierta para atender a los científicos, estudiantes y demás visitantes a este laboratorio biológico natural empotrado en el Municipio del San Martín, con ecosistemas naturales de sabana y serranía, lo cual permiten una gran diversidad de su fauna y flora.
Gracias estimado Oscar por darnos a conocer en buena hora tan maravilloso espectáculo, escenario de educación, capacitación, desarrollo tecnológico y de transferencia natural del saber.
Oscar muy buena descripción haces. Y estimulas el turismo costumbrista y ecologico
Como afiliado a RESNATUR tuve la fortuna de conocer la reserva natural El Rey Zamuro en San Martin. Excelente,mágico y acogedor lugar.